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Hasta hace pocos años, había sólo 2 opciones de tratamiento según el tamaño de la próstata: en próstatas con tamaños inferiores a los 60-80 gr, se realiza una Resección Transuretral de Próstata que consiste en introducir por la uretra un aparato que llega hasta el adenoma de próstata y cortarlo en pequeños fragmentos. La TAC se debe realizar con contraste intravenoso e incluyen tomas de imágenes una vez que el contraste ha llenado el sistema colector del tracto superior. En algunos casos, cuando la HPB contribuye a infecciones recurrentes del tracto urinario debido a problemas de vaciamiento vesical, la cirugía de próstata con láser puede ser considerada para abordar esta preocupación. La cirugía láser de próstata presenta varias ventajas que la hacen atractiva en comparación con algunos procedimientos tradicionales para tratar problemas prostáticos. Es importante destacar que la decisión de realizar una cirugía de próstata con láser se toma después de una evaluación exhaustiva por parte del equipo médico, Cirugía de Próstata teniendo en cuenta la gravedad de los síntomas, la salud general del paciente y otros factores específicos. En esta era de avances médicos, la operación con láser de la próstata se ha convertido en una opción innovadora para tratar problemas prostáticos. La HPB es una condición común en hombres mayores en los que la próstata aumenta de tamaño, lo que dará lugar a problemas urinarios. Recordemos que la próstata va creciendo en todos los hombres a medida que envejecen y, en muchos casos, produce una obstrucción en la uretra originando problemas importantes para orinar. La operación láser de próstata es un procedimiento quirúrgico que utiliza tecnología láser para tratar el aumento de tamaño de la próstata, una glándula ubicada debajo de la vejiga en los hombres. La cirugía láser de próstata presenta una ventaja muy significativa: va produciendo una fotocoagulación simultánea de los vasos sanguíneos, disminuyendo al máximo la posibilidad de sangrado, que es siempre la gran preocupación de los urólogos en la cirugía de la próstata. Si los medicamentos utilizados para tratar la HPB no son bien tolerados por el paciente o no son efectivos, la cirugía de próstata con láser puede ofrecer una alternativa. 3. Una vez listo, los profesionales del Hospital CIMA extraen el tejido prostático dividido en fragmentos más pequeños, lo que permite el paso normal de la orina por la próstata. Este procedimiento consiste en introducir la fibra láser entre la cápsula y el adenoma de la próstata para soltarlo en la vejiga. La enucleación con láser del adenoma de próstata permite operar cualquier tamaño de próstata mediante la introducción por la uretra de una fibra láser que va abriendo un camino entre el adenoma de próstata y la cápsula de la próstata. En medicina un divertículo es la aparición de una estructura hueca (o llena de líquido) en el cuerpo. La artroscopia de hombro suele limitarse a unos 90-120 minutos antes de que la inflamación por extravasación de líquido interfiera con el procedimiento y suponga un riesgo potencial para el paciente. Se cree, además, que los jugos que contienen citrato reducen el riesgo de formación de cálculos. Para poder extraerlo, Cirugía de Próstata con Láser se introduce un aparato llamado morcelador que, con sus cuchillas, tritura y extrae afuera todo el adenoma de próstata; además, permite realizar un estudio anatomo-patológico de este tejido. Además, se convierte en la solución más eficaz y rápida para los pacientes sondados. Esta técnica es menos agresiva que la cirugía abierta, aunque los pacientes deben permanecer ingresados entre 3 y 4 días, también se puede producir sangrado durante la intervención requiriendo transfusión de sangre entre 5 y 10% de los casos, entre 3 y 5% de los pacientes quedan con incontinencia de orina parcial o total y cerca del 5% presentarán impotencia sexual. Esto puede reducir el riesgo de complicaciones relacionadas con la pérdida de sangre durante y después de la operación. Organiza tu hogar para que sea cómodo durante el período de recuperación. Las principales ventajas son la ausencia de sangrado y de herida abierta en el abdomen, la rápida recuperación que permite un alta a las 24 horas, la no afectación de la potencia sexual la convierten en el paradigma de la cirugía mínimamente invasiva. Esta técnica no requiere cirugía abierta, la probabilidad de sangrado es mucho menor con una rápida recuperación postquirúrgica. Por lo tanto, es crucial discutir todas las opciones y posibles riesgos con el equipo médico antes de tomar una decisión. El tratamiento inicial es farmacológico cuyo objetivo es: orinar con más fuerza, no levantarse tantas veces por la noche o eliminar las frecuentes pérdidas de orina. Esta intervención se realiza con el objetivo de extirpar el tejido prostatico que se ha desarrollado con los años y de esta manera poder aliviar los síntomas asociados.